En La Rosa Blanca hacemos alpargatas desde mucho antes
que esté de moda usar alpargatas.
Las hacemos en Aranguren, un pequeño pueblo de Entre Ríos,
donde andar en alpargatas es lo más natural del mundo.
Algunas las hacemos bien clásicas: Negras, blancas, naturales.
Otras, liberando toda nuestra creatividad, plenas de formas
y colores. Divertidas, sorprendentes. Sobre todo, cancheras.
Nos encanta ver nuestras alpargatas caminando las calles,
los barrios y las playas de cada vez más ciudades.
Nos emociona que sean consideradas un símbolo
de libertad y sencillez, de comodidad y estilo.
Todo lo que hacemos, desde que las imaginamos,
hasta que bordamos nuestro símbolo en ellas, tiene un
único origen: Estamos enamorados de las alpargatas.
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